Corea de el Sur nunca es la misma. Su rapido crecimiento barato ha impulsado un cambio radical a su conservadora estructura social, Incluso el momento que una folclore que estaba reservada an agradar a los hombres En seguida esta dirigida a las hembras.

Inspirados en las contenido geishas japonesa asi­ como en las kisaeng surcoreanas, en Seul son cada ocasion mas populares las clubes en los que son las mujeres se encuentran dispuestas a retribuir miles de dolares por la empresa sobre un hombre.

Seri­a el caso del Bar 123, ubicado en una de las porciones mas lujosas sobre la capital surcoreana. En su the room, con la luz tenue, forman fila la ados.

Musculosos, con perfectos cortes sobre pelo, se van moviendo de un bando a otro de el minusculo cuarto, mostrando las atributos a a un grupo sobre chicas que se toman su tiempo para elegir con quien van an ocurrir las siguientes horas.

Un “oido atento”

En estos bares de acompanantes, que los surcoreanos llaman en ingles ” host bars”, Existen una conjunto de lugares reservados en el que las hembras pasan cualquier lapso con un adulto, conversando asi­ como bebiendo. En algunas situaciones Existen algo mas, pero no es algo implicito.

La de las clientas, Minkyoung, es gerenta de camareras de un hotel sobre cinco estrellas. Ella le conto la corresponsal de la BBC en Seul, Lucy Williamson, que visitaba el club una o 2 veces por mes.

Minkyoung seri­a bastante bonita asi­ como se viste de manera inmaculada. Por presencia, nunca se percibe como alguien que precisa pagar por la compania de un hombre aunque, igual que la novia misma lo explica, en aquellos lugares recibe mas amabilidad, tiene mas opciones y, sobre todo, existe mas control.

“En las bares usuales los hombres que beben solo poseen un proposito, vivir una peripecia sobre una noche. Pero yo no busco eso, y esa es la razon por la que vengo aqui, por motivo de que quiero divertirme”, aseguro.

La accion sobre las anfitriones esta bien definida: unirse y entretener. En su repertorio deberan asistir las bebidas, conversar, escuchar, danzar asi­ como cantar karaoke.

El sexo no se brinda, puesto que seria ilegal, sin embargo a Minkyoung y demasiadas diferentes hembras que frecuentan dichos locales les agrada coquetear asi­ como acariciarse con sus “parejas”.

Costo variable

Los acompanantes aseguran que alrededor sobre la mitad sobre sus clientas se encuentran dispuestas a pagar por sexo, sea en el club o afuera de el. No Tenemos una tarifa fija, asi­ como el coste varia dependiendo de la humano.

“aquellos chicos son profesionales, saben lo que estan haciendo”, explico. “luego de hablar con una femina a lo largo de una hora, nosotros conocemos cuanto dinero gana asi­ como que permite de vivir. En ese tiempo Ahora habremos analizado su idiosincrasia y lo que esta dispuesta a dar”.

Mas alla sobre la satisfaccion que le da su trabajo, James es la traduccion masculina de las anfitrionas que forman pieza de la de estas tradiciones mas arraigadas -y misoginas- de Corea de el Sur: las salones donde conjuntos sobre hombres se juntan y son atendidos por atractivas mujeres.

Prohibido manosear

Pero nunca todo el mundo los lugares son como el Bar 123. El considerado padrino de esta industria, Kim Dong-hee, creo la cadeneta de establecimientos que publicita abiertamente.

En los Red Model Bars Existen una regla que las discrepancia de el resto: nunca se facilita tocar. Las mujeres llegan, escogen a su camarada y se sientan en un cubiculo en el que Existen una mesa que los separa. A partir de alli podran charlar toda la noche.

“Hablar con un amigo seria mas barato”, admitio, “pero ellos nunca escuchan mucho. Estan ocupados y se apuran Con El Fin De hablar solo de las problemas, de ellos mismos. Aca me prestan amabilidad asi­ como me escuchan”.

Jasper Kim, director del Grupo sobre Investigacion Global Asia-Pacifico en Seul, considera que el capitalismo seri­a responsable directo de este cambio social.

“Creo que con al completo este rapidamente desarrollo Ademas hubo un transformacion drastica, y los surcoreanos sencillamente nunca saben como hacerle liga. El capitalismo Ademas esta alterando normas basicas de la sociedad”, aseguro.

“Ya no existe el elemento humano que habia en la mundo coreana. Los usuarios esta concentrada en la ciencia, en su labor. Ahora nunca creen en las relaciones humanas”, lamento Kim.

Seri­a un reto para la comunidad surcoreana, que observa como la femina, debido a su alcanzar crematistico, ha visto la forma “respetable” de elaborar frente a roles habituales sobre los dos generos. Un elemento que no sera sencillo sobre ignorar.